La sentencia que anula la convención del PRD,
mediante la cual Miguel Vargas Maldonado quedaba como dueño y señor de
esa franquicia política, pone al rojo vivo la actitud del gobierno y
muestra nuevamente que sus funcionarios son capaces de todo para
quedarse en el poder.
El gobierno atropella a todo un país en la seguridad que cuenta con
todos los mecanismos para quedarse en el poder.
El Poder Ejecutivo
controla por vínculos partidarios el poder legislativo y poco a poco va
poniendo un dogal al poder judicial; desacredita con mentiras a los
jueces para sacarlos de los cargos y, presiona a los que son capaces de
redactar sentencias apegadas a la justicia.
Además de haber colocado a sus hombres en la Suprema Corte de
Justicia y avanzar peones en el Tribunal Constitucional, confeccionó un
mamotreto para imponer a sus adeptos como fiscales.
En otros escenarios la hermana del presidente y otros dirigentes
políticos afines amenazan a empleados públicos que no cantan loas a la
reelección; funcionarios del gobierno persiguen a periodistas, los hacen
sacar de sus trabajos y presionan a los medios con suspenderles la
colocación publicitaria oficial.
El gobierno encamina el país hacia una tiranía porque tiene todos los
instrumentos de poder bajo su control y no acepta oposición.
Por Alfredo Freites ,-
No hay comentarios:
Publicar un comentario